jueves, 17 de junio de 2010

Tenemos un haz en la manga.... y más de cien motivos!



Un mismo idioma (el "universal"), banderas de todos lo colores y texturas, muchas culturas hablando en su lenguaje
pero dialogando...

Hoy, podemos decir que la especie humana se ha unido con una misma razón,
una simple distracción: el mundial Sudáfrica 2010. Se nos llena el corazón de alegría, por los colores que nos identifican ante semejante diversidad de costumbres, lenguajes, mitos y signos. Que lindo! que bien que nos hace al alma, poder hablar desde la lengua de los sentidos, no hay persona entonces que no interprete los nervios en las facciones de la cara de aquel hermano que está entrando al campo de juego...
No hay ser que no pueda hacer lectura idéntica a aquel que canta su himno
palpitando de cuerpo entero, o bien, desde la voz del corazón (con lágrimas de emoción)... El canto apasionado de algún hincha que sentimos lo que siente, lo sabemos... se vuelve algo tan genuino!

En una simbología casi mágica convergen hoy los seres, las meta y los objetivos.
No hablo aquí de las empresas, gobiernos, grupos privados o entidades que mueven este gran negocio, no es mi intención en este post!Mi idea es llamar a la reflexión de lo que somos, lo que realmente podemos lograr juntos.

Podríamos tranquilamente hacer de cuenta que vivimos un mundial contanste; con reglas de juego claras, con arbitros que tiendan a ser lo más neutrales que deban, con las mismas pasiones... Jugariamos a intercambiar banderas, en forma de palabras o bien escudos para protegernos mutuamente de nuestros antivalores.... intercambiar camisetas que nos abriguen a todos... Banderas de paz, del color de la unidad humana...

Imaginemos por dos segundos que fuese siempre tan humano y sencillo todo...
deportaríamos a los incorregibles hacia otro lugar!.
Con contratos claros, sin importar los colores, la nacionalidad,los prejuicios, los gustos o aficiones... No se si a todos les pasa como a mi...(además de emocionarme que haya ganado Argentina, lo que además nos puede llevar a hacer otra lectura de "equipo" nacional, de orden y proyectos compartidos...)
Creo que en esta analogía inventaríamos un mundo soñado, por nuestra esencia.

Tenemos nosotros mismos el timon de esta carrera... que se obnuvila debés en cuando,
pero que se visualiza cuando uno se concentra en ver el rumbo con ojos profundos...
Una mirada cuasiinvisible que no vé lo efímero...
Deseos de un ser humano que no deja de ser tal. Que gran y hermoso desafío
nos podríamos plantear como equipos con nuestras individualidades y fronteras seudolimitantes...

Me da un poco de risa pensar que la ONU podría ser quien limpie los papeles de las canchas y su tarea se limite sólo a dejar el predio listo, que la influencia de sus integrantes pudiera ser banal...
Que Caritas y Greenpeace pudieran ayudar como aguateros, pero fuesemos nosotros mismos los protagonistas... Indefectiblemente, al terrorismo y los capos de la droga internacional, los pondríamos de balones. Sí! de pelotas de fútbol para direccionarlas a donde más nos guste...

Tenemos muchas razones que, sin verlas, nos unen... Tenemos una lengua universal que nos contagia las risas, los bailes, la alegría, el cansancio o amargura. Nos lleva al entendimiento, a los signos compartidos cuando fluyen puramente las emociones y sentidos, especialmente a seguir nuestras bafanas con la pasión que se merece esta esencia!


Juro que me lo imagino a Gandhi de Juez de línea!... Sin dudas, el mejor partido que desearía ver Dios...