Entre silencios sorpresivos nos encontraste... El miedo más ínfimo de todo ser humano se despierta en este momento, cuando el adiós es hasta luego y ese hasta luego le da una palmada en la espalda al olvido, que dormitando se queda para no hacerse conciente... Tras muchas lágrimas pero muchas más sonrisas y buenos momentos te quiero homenajear... saludar, alagar, escribirte... pero NUNCA DESPEDIRTE!
Los nudos en mi garganta pelean con todas las palabras que tengo por pronunciar... Ojala! los angeles sepan brindarte la mejor banda ancha... No me caben dudas de que estarás de la manera más pacífica que un ser tiene como meta estar... Aunque me viene un pensamiento de tristeza y una angustia por ganas de no haberte escuchado como debía ser, haberte aconsejado si así alguna vez lo requeriste, haberte dado el mejor y más grande abrazo que en honor a nuestra amistad hubieras merecido, más que a nuestra amistad a la original, auténtica y espontánea persona que fuiste y al alma tierna y más humana que serás eternamente....
Si te tengo que contar como te imagino... seguramente tiembla San Pedro con tus cánticos en la puerta de ese espacio que pienso bello! No me caben dudas de que estarás brindando con algún que otro guitarrero, bailando en espacios que estarán hechos a tu medida, haciendo versos con algún alma cómplice o puteando algún inglés.... Como sea que ahora estés, esta paz te la merecías hermano!
Me queda ese gustito un poco culpable de poder haber hecho algo más por vos... esa sensación de no haber dado todo lo que a mi alcance estuvo por un amigazo!
Estas palabras, colmadas de lo que siento, de los recuerdos de muy lindos momentos de la vida (jardín, escuela, colegio, andanzas del pueblo)... Tu inigualable voz dirigiendo las noches de eventos, tus ocurrencias y chistes que alegraron siempre el aula y los recreos...
Quito! Galle! Algún día nos volveremos a cruzar para que me cuentes nuevas anécdotas, allá no necesitas cuidarte amigo de nada(como te solía decir)... Estoy segura, convencida te diría que comienza el Show que tanto necesitabas, una intensa paz de la que goza tu alma y una insuperable alegría de darte cuenta la cantidad de gente que quedo por decirte lo mucho que te quería y otros muchos que te acompañaron incanzablemente, y te extrañan mucho, pero los que podrás cuidar desde arriba.
Te quiero amigazo! Hasta algún día de estos!
